A comienzos de junio la Dirección del Trabajo consultó a la Superintendencia de Salud respecto de la definición de Consalud. El regulador precisó que en caso de producirse fallas o eventos “de cualquier naturaleza”, éstos no pueden afectar a los afiliados.
Fuente: pulso.com
La isapre vela por la administración financiera del seguro privado de salud y no por la salud per se de los pacientes. Esa fue la argumentación de la Dirección Regional del Trabajo (DT) para rechazar los servicios mínimos solicitados por Consalud en caso de huelga.
El proceso de calificación de la aseguradora ligada a la Cámara Chilena de Construcción (CChC) es el primero para una isapre, por lo que podría sentar un precedente para el resto de la industria.
La resolución de la DT no fue reclamada en segunda instancia a través de un recurso jerárquico ante el director nacional Christian Melis, por lo que hoy las partes ya están negociando colectivamente y en caso de huelga, al no haber servicios mínimos, habría paralización total de funciones, a excepción de los no sindicalizados.
Pero la Dirección del Trabajo no actuó sin primero pedir la opinión del regulador sectorial.
El rol de las superintendencias en la definición de servicios mínimos es parte clave para cada industria. De hecho, en junio el Banco Central levantó el punto al señalar que en el caso del sector financiero, es fundamental que el fiscalizador laboral tome en cuenta la visión de la SBIF a la hora de definir grupos de emergencias.
La Superintendencia de Salud se ha pronunciado al respecto en cuatro ocasiones a solicitud de la DT. Además de Consalud, en dos ocasiones fue por instituciones que prestan servicios de salud y la cuarta vez por una clínica -Clínica Integral de Salud-.
Tras no lograr acuerdo con su sindicato, Consalud se vio obligada a acudir a la DT para que ésta resolviera, la que luego pidió al organismo dirigido por Sebastián Pavlovic un pronunciamiento técnico.
“Mediante el oficio citado en el Antecedente, esa dirección (DT) ha solicitado a esta Superintendencia un informe técnico en relación al funcionamiento de la Isapre Consalud en los casos que se indican, en el marco del requerimiento de calificación de servicios mínimos y equipos de emergencia que efectuó dicha institución de salud previsional”, se lee en el oficio fechado el pasado 7 de junio que emanó desde la Superintendencia a la DT.
El documento agrega que el organismo “ha dictado instrucciones de general aplicación para que las instituciones fiscalizadas aseguren a sus beneficiarios la continuidad de los servicios asociados al contrato de salud previsional ante toda contingencia que las pueda afectar (…) y que apunta fundamentalmente a que fallas de sistemas o eventos de cualquier naturaleza que produzcan interrupciones del servicio no podrán traducirse en perjuicios de los beneficiarios, debiendo la isapre asegurar que la bonificación otorgada corresponda a la modalidad de pago de las atenciones médicas por la que ha optado el beneficiario”.
Precisamente dicho párrafo habría causado molestia al interior de la isapre controlada por ILC. Es que según comentan, esperaban que el regulador fuera más explícito en cuanto a qué servicios deben ser considerados en el proceso de calificación.
Además, el documento agrega que “en caso que la institución haya encargado la ejecución de procesos relacionados con el otorgamiento de los beneficios a terceros, deberá velar porque los contratos establezcan cláusulas de continuidad del servicio y seguridad de información de sus afiliados; no obstante, la institución es siempre responsable de las obligaciones que el contrato de salud impone”.
Tras el oficio firmado por el propio Pavlovic, la DT rechazó los servicios mínimos de Consalud, según comentan fuentes.
Consultados al respecto, desde la isapre declinaron referirse al tema.