En 2016, el conjunto de las dietas de los directores de las empresas IPSA ascendió a $28.929 millones. La cifra representa una caída de 3,13% en relación al año anterior, la que se explicaría -entre otros elementos- por la desaceleración económica.
Fuente: pulso.cl/
La desaceleración económica ha sido una de las preocupaciones centrales de los directores de las principales empresas locales. Y ahora, también impactó en sus sueldos. Según información de las memorias de las compañías IPSA, el gasto en remuneraciones de los directores de dichas compañías retrocedió en 3,13% durante el año pasado, totalizando $28.929 millones.
Del total del gasto, el 19% fue utilizado para pagar los sueldos de los presidentes de las compañías IPSA. En términos porcentuales, las sociedades ligadas al grupo Luksic, Sociedad Matriz del Banco de Chile y Quiñenco, lideran el listado (ver infografía). La primera, creada para pagar la histórica deuda al Banco Central, desembolsa al año $130 mil millones para solventar el gasto en remuneraciones del directorio. De este total, $125 millones se destinaron a pagar la remuneración como presidente de la mesa de Andrónico Luksic, controlador del holding. En el caso de Quiñenco, en tanto, de los $1.481 millones del total destinado los sueldos de la mesa, $942 millones -64% del total- quedó fijado como remuneración del mismo empresario. Eso sí, la cifra total de la dieta cayó prácticamente a la mitad en relación al año pasado.
Según comenta Pedro Lacerda, managing director de Hays America's, el porcentaje del total del gasto en remuneraciones que se destina al presidente suele ser de 15% en mercados desarrollados. Es decir, cuatro puntos porcentuales menor al coeficiente que se maneja en Chile. Esto, debido a la falta de profesionales preparados para este cargo en el país. Además, agrega, debido al nivel de desarrollo del mercado, en Chile suele haber una relación estrecha entre los directores, el controlador y su presidente, por lo que es difícil tener criterios neutrales a la hora de fijar las remuneraciones. Así, en la medida que maduren las industrias, es esperable que la cifra se reduzca.
Para Max Vicuña, fundador del head hunter Amrop MV Consulting, la práctica generalizada en los directorios locales es que el líder de la mesa reciba el doble del total de la dieta de un director. Aquello, debido a las responsabilidades administrativas y legales que asume. Eso sí, agrega, existe una amplia arbitrariedad en estos parámetros.
Las compañías que realizó los mayores ajustes en términos absolutos en las remuneraciones totales de sus directores fueron otras dos empresas ligadas a la familia Luksic: Vapores, y la misma Quiñenco.
Según Lacerda, el retroceso en el global de las empresas IPSA se explica por dos elementos.
Primero, la desaceleración económica, un tema que fue tocado de manera transversal por la mayoría de los presidentes de las compañías en las cartas dirigidas a los accionistas en las memorias de 2016. A este ítem se suma el crecimiento de la masa salarial. Esta última, dice Lacerda, ha venido creciendo a un ritmo superior al de la economía. "Ningún país puede aguantar eso", agrega, detallando que un ajuste en estas condiciones era esperable. Eso sí, la magnitud de la caída (3,13%), estaría dentro de lo considerado "normal".