Además, el legislador propondrá el cobro, por una vez, de un impuesto a los más altos patrimonios ad portas de que se reanude el trámite de la reforma tributaria.
Gastos permanentes financiados con ingresos permanentes. Ese es uno de los desafíos que ha impuesto la agenda social, en un contexto de aumento progresivo de la deuda pública a niveles cercanos al 40% hacia 2024 y el uso de activos del Tesoro Público por US$7.600 millones, según cifras del Ministerio de Hacienda.
En ese contexto, de cara a la reanudación de la discusión de la Reforma Tributaria, entre senadores de oposición se discute proponer la incorporación de nuevas medidas tributarias recaudatorias, o bien, acordar un proyecto de rápido despacho con medidas en ese sentido para principios de 2020.
Quien impulsa esta idea es el senador del PS Carlos Montes, quien recuerda que si bien existe un acuerdo con Hacienda para estudiar cambios en la estructura impositiva, "se requieren más recursos para abordar las urgencias sociales" y que para eso "es necesario que se reabran ciertos temas y que se puedan aprobar ahora".
Se trata de dos líneas de acción. Primero, explica el legislador, gravar "por una vez los patrimonios totales de los sectores de mayores ingresos, es decir, de todas las fortunas de este país" y, segundo, abordar tres tipos de exenciones: las ganancias de capital en la venta de acciones con alta presencia bursátil, el market maker y los Fondos de Inversión Privado (FIP).
Respecto de los detalles, quien estuvo trabajando en la propuesta, el académico de la Universidad de Los Lagos, Hernán Frigolett, explica que la idea es imponerles un impuesto gradual hasta una tasa plana en un rango mínimo de 5% y un máximo de 20%. "Esa es la primera línea para generar un incremento de la recaudación", dice.
¿Es conveniente?
Entre los expertos existe consenso en que este tipo de beneficios tributarios deben revisarse. "Las exenciones generan distorsiones e inequidades que se justifican por objetivos propios de una época y/o industria que se quiere reactivar. Es obligación del regulador su revisión constante", señala Álvaro Moraga, de Moraga y Cía. En tanto, Claudio Bustos, de Bustos Tax & Legal, complementa que "es fundamental que, si se desea avanzar en la reducción o eliminación de las franquicias tributarias en las áreas mencionadas, ello se realice en forma gradual".
¿Por qué?
Juan Pablo Cabello, de Cabello y Cía., advierte que si bien "es una medida que tendería a hacer el sistema menos regresivo, deben evaluarse los efectos adversos que puedan generarse en el mercado de capitales, puesto que reformas muy agresivas pueden llevarnos a situaciones como lo ocurrido en Perú, donde fuertes modificaciones afectaron ese mercado".
Respecto de cuánto recaudar, el académico de la UAI Claudio Agostini señala, por ejemplo, que terminar con la exención de ganancias de capital para acciones con alta presencia bursátil generaría una recaudación de US$870 millones, y recomienda poner fin también a la renta presunta (que estima en US$300 millones) y subir el impuesto al diésel (US$1.800 millones). A su juicio, terminar con este tipo de exenciones "es equitativo horizontalmente, ya no hay tratamientos preferenciales para ciertos tipos de contribuyentes o algunas fuentes de ingreso y cierra espacios de elusión y de evasión".
* En el protocolo de acuerdo con la Comisión de Hacienda se estableció crear una comisión que en 6 meses estudie mejoras al sistema tributario.
Fuente: El Pulso/La Tercera