Economistas discrepan por los efectos y las vías de compensación.
Un seminario en el Senado fue el escenario para que ayer enfrentaran sus posturas, acerca del sistema tributario y la necesidad de integrar o desintegrar, el ex presidente del Banco Central Rodrigo Vergara y el ex subsecretario de Hacienda, Alejandro Micco.
Vergara, quien fue parte del equipo de economistas que diseñó durante la campaña presidencial de Sebastián Piñera la propuesta de perfeccionamiento de la reforma impositiva de 2014, fue el primero en abrir el debate, defendiendo la reintegración.
Medida que eventualmente incluiría el proyecto de modernización tributaria del Ejecutivo. "La integración es la forma más simple de lograr equidad horizontal, es decir, que los que tienen similar paguen similar", señaló Vergara, añadiendo que "el sistema integrado tiene el gran beneficio de que es equitativo horizontalmente y no se gravan doblemente los ingresos del capital, por lo tanto no se perjudica a la inversión".
También recordó que "no son tan pocas empresas (que se beneficiarían con la reintegración), de partida son todas las sociedades anónimas, las sociedades por acciones. La pregunta que uno se tiene que hacer es si tiene sentido. Si son muchas personas, estamos hablando de equidad horizontal", dijo.
Micco reconoció que el actual sistema semiintegrado es un instrumento y no un fin; y que si se quiere reintegrar, se deben estudiar las compensaciones. "Lo importante es que compensación sí tenga un costo, sea focalizada en el grupo al cual se está favoreciendo, el tema aquí es mantener la progresividad", señaló.
Micco desestimó que se busque compensar vía el impuesto digital. "No puedo no estar en desacuerdo con eso, es parte de la modernización. Pero en este caso los impuestos los pagaría un grupo muy distinto al que le estamos dando el beneficio. En este caso el impuesto es más parecido al IVA, por lo tanto no es uno a uno la compensación. También hay que decir que aquí no estamos aumentando los impuestos. Antes los impuestos se pagaban de una forma", advirtió.
EFECTO FISCAL
La reintegración tendría un costo de menos ingresos, entre US$ 500 millones y US$ 1.000 millones.
Gremios entregan propuesta tributaria y ministro Larraín reafirma que proyecto no afectará la recaudación
Ad portas de presentar su propuesta de modernización del sistema tributario, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, recibió ayer a representantes de distintos gremios empresariales, encabezados por el presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Alfonso Swett. Junto a él asistieron dirigentes de la Conapyme, Confederación del Comercio Detallista, Asociación de Emprendedores y Multigremial de Emprendedores.
El objetivo del encuentro fue la presentación de una propuesta tributaria elaborada en conjunto por la CPC y los demás gremios, y exponer diversas inquietudes del empresariado.
"Queremos escuchar la voz de las pymes, de los emprendedores, de las regiones y de las empresas. Debemos escuchar a la gente para este proyecto, que será muy importante, crucial, para la inversión, el ahorro, el crecimiento y el empleo", indicó el secretario de Estado.
Larraín enfatizó que el proyecto -que sería presentado a fines de agosto-será "sólido, consistente y no reducirá la recaudación. Eso es un compromiso que tenemos".
En el encuentro, ni el titular de Hacienda ni los gremios participantes entregaron mayores detalles sobre las propuestas presentadas. Sin embargo, a fines de julio, el líder de la CPC adelantó a "El Mercurio" los seis objetivos que persiguen en la discusión tributaria: "Certidumbre tributaria para trabajar con reglas claras y precisas; reducir la carga administrativa, especialmente para las pymes, y fomentar el emprendimiento a través del Código Tributario porque hoy lo desincentiva; fomentar la inversión y el empleo, y generar incentivos a la inversión extranjera. También somos muy responsables con la realidad fiscal y el objetivo es que esto sea neutro en recaudación".
Fuente: www.emol.com