Es una buena práctica para las organizaciones establecer una función de auditoría interna para el seguimiento de los controles y procedimientos claves.El seguimiento es una parte integral del sistema de control interno de una organización que ayuda a asegurar su eficacia. La auditoría interna puede aportar una contribución significativa y valiosa a la organización.
Fuente: diario.elmercurio.com
Es una buena práctica para las organizaciones establecer una función de auditoría interna para el seguimiento de los controles y procedimientos claves.El seguimiento es una parte integral del sistema de control interno de una organización que ayuda a asegurar su eficacia. La auditoría interna puede aportar una contribución significativa y valiosa a la organización.
Con el nivel adecuado de recursos, la función de auditoría interna debe ser capaz de:
Proporcionar garantías objetivas al consejo de administración y a la dirección en cuanto a eficacia del marco de gestión de riesgos y control interno de la organización.
Ayudar a la administración a mejorar los procesos mediante los cuales se identifican los riesgos.
Asistir al consejo en sus responsabilidades de fortalecer y mejorar la gestión de riesgos y marcos de control interno; y
Donde esté calificado, puede proporcionar seguridad y asesoramiento en el área de especialización.
No obstante, la necesidad de una función de auditoría interna variará en función de los factores, como la escala, la estructura, la diversidad, la complejidad de las actividades, el número de empleados y otras consideraciones de costo / beneficio. Sin embargo, en ausencia de una auditoría, el directorio debe aplicar otros procesos de monitoreo para asegurar que el sistema de control interno funciona como se pretende.